miércoles, 12 de noviembre de 2014

Smiley Pumpkin 2014: Terror en Amityville




Otro año más pasa. No sé qué pasa que, desde que tengo hijas, el tiempo vuela de esta manera. O ellos te hacen sentir el paso del tiempo, o es que ya no cunde como antes, pero el caso es que desde los 30 a los 40 me da un poco de vértigo pensar en el paso de los años.

Pero no nos pongamos melancólicos. De nuevo contactó Xavi conmigo, recordándome que llegaba Halloween, y con él Smiley Pumpkin. Este año, la verdad, iba bastante despistada por temas varios personales y de trabajo. Por si no recordáis, Smiley Pumpkin es un festival que hace un grupo de amigos alrededor de una película de miedo. En estos enlaces podéis ver los pasteles de 20132012.

Este año la película elegida era "Terror en Amityville", la historia de una familia que se muda a una casa donde hubo una serie de asesinatos hace años. Espíritus, la casa que parece que cobra vida e influye sobre los habitantes, ya sabéis, todos esos ingredientes habituales de casa encantada.

La idea era hacer la casa, con su fachada característica, y esas ventanas de la buhardilla que le daban un aspecto de ser vivo.

Para simular la sangre goteando por la fachada, primero cogí el colorante diluido con el pincel para que cayeran goterones, aunque acabé con una jeringa imitando las salpicaduras (seguro que, a los que tenéis niños, os ha pasado alguna vez y ha acabado la pared del salón o la cocina así salpicada de Apiretal, ja ja ja). Esta vez fue divertido porque no me tocaba limpiar.


Aquí podéis ver un detalle de la base. Una condición es que tiene que aparecer el nombre del festival y el año. El detalle del hacha y los troncos aparece varias veces en la película, cuando el comportamiento del hombre empieza a cambiar, un clásico esa escena cortando troncos como poseido.


Cada año el pastel va acompañado de unas galletas, de la misma temática. Al principio de la película se ve la escena de los asesinatos de la familia en sus camas, y eso quería representar. Así que manchas de sangre y los nombres como escritos con el dedo manchado de sangre.Y una huella dactilar, que no analicen de quién es porque acabaría a la sombra...


Por último os dejo una foto que me envió Xavi de la puesta en escena.


Espero que os haya gustado, ¡y hasta el próximo Smiley Pumpkin!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Patricia como cada año el pastel y las galletas han sido una pasada. Quedamos muy contentos tanto por su contenido como por su aspecto. Yo me hinché de pastel y creo que me hubiera podido comer otro entero. Es ya una tradición anual que esperamos con muchísimas ganas y cada año te superas. Enhorabuena por este logro porque a nosotros nos has hecho el festival un poquito mejor. Como siempre!

Un abrazo y seguiremos con un nuevo reto el año que viene si todo va bien! :D Gracias por todo Patricia!

Xavi